crónicas geotécnicas: capítulo CLMIII; sobre una visión histórica del papel de los ensayos de laboratorio

lo primero fue el principio… y allí no había nada… ni siquiera un miserable bosón de Higgs con un límite líquido superior a cuarenta…

… y después el Sumo Hacedor (K.T.) hizo el SPT… (valeeeee… ahí metió la pata, eso no estaba en el guión)

… y después, digo, alguien pensó: si no puedo ver cómo se comporta una zapata, porque es muy grande, puedo probar con una zapata pequeña.

… y la luz se hizo en las tinieblas, y el hombre se apercibió del concepto «escala».

… y llegaron los ensayos de laboratorio.

y cuando los señores del laboratorio se encontraron con los señores de los ensayos «in situ» en la barra del bar, se acabó la paz (cuanto menos en la geotecnia, si es que la hubo alguna vez)

… y entonces todo fue confusión: y los hombres mezclaron el agua con el vino, los triaxiales con los penetros y los fundamentos con las correlaciones… y los hijos de los hijos abandonaron la fe para adorar las a puntazas (cónicas o cuadradas), y se olvidaron los consejos de Jiménez Salas, y se hacían ensayos de consolidación a gusto del Peticionario (para tener los resultados antes de cinco días).

… y no hubo juez que dirimiera en las disputas; y el visado valía de poco más que para certificar que el firmante no estuviera ya a la derecha del Sumo Hacedor (K.T.)

… y la algarabía y el descontento llegó entonces a los oídos del Sumo Hacedor (K.T.); quien desde su altar alzó la VOZ y declamó:

‘PÓNGASE REMEDIO A LA FALTA DE RIGOR (…carajo)’
… y para desazón de los hijos de los hijos de sus hijos, que no supieron cuidar del huerto de la geotecnia (con lo bien que nos hubiera ido con unas tarifas mínimamente decentes), K.T. mandó que todo fuese normalizado, y que encima las normas fueran de pago… y que AENOR lo gestionara todo a su real gana.
… y en eso estamos.
… y, como con todo, aún con AENOR, con acreditaciones y con declaraciones responsables mediante, no es raro todavía ver cosas raras (como edómetros que milagrosamente se hacen en cinco días con ocho escalones de consolidación), de vez en cuando no está de más echarle un ojo a eso que se ha dado en llamar «el estado del arte» de la geotecnia (que no siendo ni una ciencia, mucho menos va a ser arte, digo yo…); y puestos a echar un ojo, tenemos a tiro (y gratis, que no es de AENOR) un excelente reporte sobre eso de los ensayos de laboratorio, recientemente presentado en el XVII Seminario Venezolano de Geotecnia:

http://www.geosuport.com/documentos/geotechnical-laboratory-testing.pdf

nuevos gadgets en el laboratorio de ensayos

… el artículo no se limita a exponer de forma más o menos didáctica los avances en la caracterización de parámetros geotécnicos mediante ensayos de laboratorio; más allá, se plantea (y he ahí lo interesante) una discusión crítica del porqué del declive en la importancia relativa de los ensayos de laboratorio en el proyecto geotécnico respecto a los ensayos «in situ» y, sobre todo, respecto a las tan manidas suposiciones ultraconservadoras sobre las prestaciones del terreno que plagan los estudios y proyectos, y que se toman «porque estamos del lado de la seguridad», encareciendo de forma desproporcionada las soluciones constructivas adoptadas (y venga hormigón y hierro.)

la cita que en la introducción se hace de unas palabras de K.T. es todo un manifiesto:

“I came to the United States and hoped to discover the philosopher’s stone by accumulating and coordinating geological information…. It took me two years of strenuous work to discover that geological information must be supplemented by numerical data which can only be obtained by physical tests carried out in a laboratory.”

una lectura de la biografía de K.T. induce a pensar que cuando se marchó a EEUU estaba muy hasta la coronilla de haber intentado encontrarle sentido y unidad a todas las correlaciones empíricas con las que se manejaba la geotecnia de entreguerras, y no fue hasta que les metió fuego a todas e hizo tabla rasa, trabajando en un laboratorio de mecánica (lo de mecánica de suelos vendría después), que empezó a sacar el agua clara de tamaño lío.

… en resumen… un texto que, con los calores de agosto, apetece más que un desarrollo sobre los problemas de estabilidad de taludes debidos al debilitamiento de los macizos muy poco competentes de lutitas expansivas miocenas por efecto de la descompresió lateral en excavaciones importantes (eso igual me lo dejo para septiembre…)

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próximos capítulo: de cómo el Sumo Hacedor (K.T.) habló desde el altar y dijo: dejad de adorar las acreditaciones y presentad declaraciones responsables… y los hijos de los hijos de sus hijos respondieron al unísono… cagonlosmengues… ¡¡¡y qué hago ahora con la batería triple!!!

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4 respuestas a crónicas geotécnicas: capítulo CLMIII; sobre una visión histórica del papel de los ensayos de laboratorio

  1. Frankie, conforme lo iba leyendo me estaba acordando de aquella frase de «La Vida de Brian»“… y habrá rumores de que las cosas van mal. Y se producirá una gran confusión entre las gentes. Y nadie sabrá dónde está nada. … y nadie sabrá dónde están… esas cositas que llevan una base de rafia y una especie de correa. En esa hora, el amigo perderá el martillo de su amigo. … y los jóvenes no tendrán ni idea de… de dónde están las cosas que sus padres… que sus padres habían guardado allí la noche antes, a eso de las ocho”.Buenísimo, como siempre.

  2. frankie dijo:

    ay, ay, ay… cuanta falta nos haría una colla de Monti Python «en esto de la geotecnia», eh? XDDDD

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